ESTRÉS EN EL GATO

Seguramente en alguna ocasión os habréis preguntado si los gatos también se estresan o si por el contrario, es algo que solo nos ocurre a los humanos; pues bien, sí, los gatos también sufren estrés como nosotros. Los gatos son animales que necesitan tener su entorno bajo control y pueden desencadenar una intensa respuesta de adaptación ante el más mínimo cambio. Algunos gatos gestionan muy bien el estrés, pero para otros supone un problema de salud que debe ser tratado.

¿QUÉ ES EL ESTRÉS?

El estrés es un mecanismo de defensa que está presente tanto en los seres humanos como en los animales. Se trata de una respuesta adaptativa al entorno que permite la supervivencia ante situaciones de peligro.El problema es que el estrés puede ser patológico cuando se pone en marcha de forma reiterada y en situaciones que no lo requieren.

SÍNTOMAS DEL ESTRÉS

-APARICIÓN DE ENFERMEDADES INFECCIOSAS REITERADAS El estrés supone la liberación de múltiples hormonas, las cuales interfieren en el adecuado funcionamiento de los glóbulos blancos o células de defensa, por lo tanto, el sistema inmunológico del gato deja de responder adecuadamente. Si contrae de forma reiterada enfermedades infecciosas y autoinmunes debemos sospechar de un estado de estrés crónico, que también puede manifestarse con otros trastornos como la alopecia o el asma bronquial.

-AUMENTO DE LA AGRESIVIDAD Si vuestr@ peludit@ ha pasado de ser un animal dócil y manso a ser una mascota agresiva, entonces puede estar sufriendo estrés. No todos los gatos manifiestan la agresividad de la misma forma, no obstante, un gato agresivo puede presentar los siguientes comportamientos en mayor o menor grado: • El gato bufa • No quiere relacionarse con las personas ni con otras mascotas • Muerde y araña • Eriza el pelo de la espalda • Mantiene las pupilas dilatadas y la mirada fija

-AUMENTO DE LA ANSIEDAD El estrés produce ansiedad. La ansiedad es un gran indicativo de estrés, un gato con ansiedad es un gato que muestra un constante miedo y fobias que antes no eran evidentes. Uno de los componentes más graves de la ansiedad felina son los comportamientos compulsivos como son las estereotipias (acciones repetitivas que el animal lleva a cabo sin in fin determinado). Un gato con ansiedad es propenso a la autoagresión, como puede ser un lamido excesivo y la ingesta de objetos no comestibles, como por ejemplo tela.

-TRASTORNOS ALIMENTARIOS Un gato con estrés pude perder por completo el apetito e incluso llegar a presentar malnutrición; otra conducta que podemos apreciar en un gato estresado es la de comer compulsivamente y no tolerar bien la comida, vomitando finalmente.

-MARCAJE Un gato estresado siente que ha perdido por completo el control sobre su entorno y hará todo lo posible por recuperarlo. Un signo evidente de estrés en gatos es el marcaje de paredes y muebles grandes (incluido el sofá). El marcaje por estrés se produce en forma de arañazos de arriba hacia abajo, verticales.

¿QUÉ SE PUEDE HACER?

Lo primero que tenéis que tratar de averiguar es qué le está causando el estrés a vuestr@ peludit@; hay muchas causas por las que se pueden estresar, como puede ser algún cambio significativo en la vivienda, la llegada de una nueva mascota a la familia, la llegada de un bebé, algún cambio en la forma de relacionaros con éll@s, etc. También tendréis que descartar la posibilidad de que exista alguna enfermedad física, por lo que os recomendamos que acudáis a vuestro veterinario para que lleve a cabo una exploración física del animal. Existen también en el mercado tranquilizantes naturales que pueden hacer que vuestr@ peludit@ se relaje, se tranquilice un poco y reduzca su nivel de estrés.

Darle a vuestr@ peludit@ mucho cariño y amor, dedicarle todo los días un buen rato a jugar para que libere toda la energía que lleva dentro y al mismo tiempo, de una manera sencilla, estaréis estrechando y mejorando vuestra relación con ell@s.

Esperamos que esta información os resulte útil y una semana más, disfrutar de vuestr@s peludit@s.

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