Estos hermanitos fueron milagrosamente rescatados de una caja de zapatos abandonada junto a un contenedor en El Álamo. Tenían apenas días y el cordón umbilical todavía pegado a su cuerpecito. Desde entonces, su casa de acogida les ha criado a biberón, entregándoles tanto cariño y dedicación que estos gatitos se han convertido en animalitos tan fiables y equilibrados como cariñosos y dulces con las personas. Conviven con un niño de 4 años con el que se divierten a diario. Ahora solo queda este peque llamado Bochinche,su casa de acogida cuenta que es el primero en pedir, investigar, y el mas aventurero