Tom es un espectacular gato siamés tostado oscuro, claramente abandonado y que a diario aparecía a las puertas de una casa en busca de algo de comida. Al final, la casa decidió recogerle para resguardarle de las penurias de la calle y buscarle un hogar definitivo. Las fotos lo dicen todo: un gato extremadamente cariñoso, sociable, ávido de ternura, afecto, mimos,... Un gato con un carácter muy fácil, amable y amoroso que encajará en cualquier hogar. Se acoplaría perfectamente con niños.