Liria e Iris, dos hermanitas criadas con perros. Recogidas con su mamá recién paridas en la calle, han crecido felices y atendidas, junto a varios perros. Dulces, equilibradas, extrovertidas, suaves, muy cariñosas y tranquilas, han mimetizado con los perritos y a veces les salen respuestas más caninas que felinas. Unas gatitas que se adaptarán con facilidad a cualquier entorno, también con niños.