a MANDARINA, le dejaron abandonado en una caja de cartón, al ser rescatado y en una casa de acogida se muestra cariñoso, divertido, disfruta de la compañía felina y de la presencia humana, un gato optimista por naturaleza, capaz de llenar nuestra vida de mucha ternura. Se entregará en adopción a familias que ya tengan un gato en el hogar.