Fruto de una camada no deseada y de la irresponsabilidad de los dueños. Fue la última que quedó de la camada y como no le encontraron familia, se deshicieron de ella en la calle. Recogida y en casa de acogida, es una gatita ya integrada en su hogar de adopción. Juega con los niños, con los gatitos y el perro de la casa. Una cachorrita tremendamente cariñosa y extrovertida, sin miedos, ni traumas. Se entregará con contrato de adopción y reconocimiento veterinario completo (desparasitada, testada, vacunada, identificada, con compromiso de castración y con cartilla).