Llegó a nosotr@s hace casi tres años, nos lo trajo una pareja que lo encontró en la calle al borde de la muerte (semi comatoso), estaba en los huesos, desnutrido, deshidratado, ni se movía, tenía los ojos hundidos, pesaba lo que un cachorrito de 2-3 meses siendo un gato adulto una voluntaria se lo llevó a su casa para cuidarle y hacer lo que se podía por él.
VIDA empezó a remontar y coger fuerzas, entonces vimos que era un claro caso de abandono que no fue capaz de sobrevivir en la calle; actualmente Vida se encuentra viviendo en nuestro refugio conviviendo con el resto de gatitos sin problema ya que le gusta jugar un montón… Esa cara pícara y esos ojazos llenos de VIDA que motivan a entretenerse más de la cuenta están pidiendo a gritos que llegue su familia definitiva… quieres ser tú el humano con quien este rubiales comparta toda su energía, cariño y ronroneos? VIDA te está esperando¡¡¡ Y ahora... ¿Nos llamas?