Es complicado poder determinar las razones de este comportamiento por los pocos datos que se nos aportan. Podemos dar alguna idea general sobre lo que podría estar pasando pero creemos que tú, como dueño/a, vas a ser la persona más preparada para averiguar qué le ocurre a tu gato y solucionar este problema porque le conoces y observas a diario.

Cuando surge un problema de este tipo, siempre hay que buscar en dos direcciones: o problema veterinario (enfermedad) o de conducta. Es decir, o el gato sufre una dolencia (estreñimiento, cistitis,...) que puede ocasionar estos desórdenes o, quizás, lo que hace es intentar expresar algo: descontento , ansiedad, estrés o miedo por problemas del entorno, conflictos entre gatos, bandejas sucias o insuficientes en número o, quizás, algunos cambios recientes en el domicilio, ...

La primera medida, por sencilla y por ir descartando, es la visita al veterinario y que nos confirme si el gato pudiera tener alguna enfermedad que, una vez tratada, permitiría que se eliminara el problema.

Si el gato no tuviese problemas de salud, entonces hay que centrarse la parte conductual.

Una primera medida, también por ir descartando y por sencilla, puede centrarse en el arenero. Si le disgustara algo en torno a la caja, buscará otro lugar para hacer sus necesidades (caja a compartir con otro gato, cambio reciente del tipo de arena usada, cambio de caja, caja pequeña para dos gatos, ubicación inapropiada de la misma, colocada cerca del comedero/bebedero o en un lugar poco tranquilo, ...) Por otra parte, cuando limpies los excrementos que ha dejado fuera de la caja, hazlo con productos que no le inciten a seguir haciéndolo, no uses lejía (muy atractiva para ellos) para limpiar cacas, si quedasen huellas y olor a lejía, volvería a hacerlo en ese lugar.

No podemos determinar si pudiera deberse a la llegado del segundo gato que, por su edad (1 año) y el tiempo que el tuyo lleva con el problema (unos meses), podría tener alguna relación. Desconocemos cuál es la relación entre ellos, si se llevan bien e interactuan entre ellos, ... Si no hubiesen conseguido una buena sintonía, también podría afectar al comportamiento del gato. Entendemos que ambos están castrados, si no fuese así, también podría influir. Tampoco sabemos si ha habido algún cambio en el domicilio por pequeños que sean que pudieran haber afectado al gato: llegada de un nuevo miembro, menos tiempo en el hogar, menor atención hacia el gato, cambio de mobiliario,...

Lo que no hay que hacer nunca es pegar ni reñir, no se conseguirá nada si utilizamos la violencia con nuestra mascota. Tampoco abuses de spays u otros productos disuasorios o calmantes, tipo feliway, porque camuflan el verdadero motivo de su comportamiento, es necesario encontrar la razón que provoca este desorden.

Quizá, mientras observas a tu gato y piensas en la razón auténtica que está motivando su comportamiento, puedes intentar probar otro lugar donde colocar la bandeja de arena que no sea el baño (por si el olor de las tuberías le llamaran la atención) y dejarlo bien cerrado para impedir que entre.